El concepto de estimulación cerebral normalmente se asocia con la implantación de electrodos en ciertas regiones del cerebro para regular patrones eléctricos anormales en personas con problemas neurológicos. Sin embargo existen otros tipos de estimulación no invasiva, con beneficios igual de importantes para el bienestar de las personas.

Estimulación cerebral positiva vs negativa

Es posible estimular nuestro cerebro de forma positiva o negativa a través de pensamientos, palabras, experiencias y música. Los estímulos negativos pueden afectar drásticamente (y para mal) el modo en que vemos e interactuamos con el mundo.

Para contrarrestarlo, la neurociencia recomienda estimular positivamente nuestro cerebro concentrándonos en pensamientos de bienestar, gratitud, eficiencia y poder personal.

Cómo influyen en nuestra vida las ondas cerebrales

Las ondas cerebrales son voltajes eléctricos oscilantes en el cerebro que miden solo unas pocas millonésimas de voltio. Como resultado se sabe que estos voltajes influyen en el proceso de curación y reparación de tejido, como cuando un paciente tiene una actitud positiva ante la idea de sentirse mejor.

Las ondas cerebrales que genera se extienden a través del sistema peri neural hasta la parte lesionada del cuerpo. Esta es una de las explicaciones fisiológicas para el efecto placebo.

Incluso hay evidencia de que estimular cierto tipo de ondas cerebrales tiene efectos positivos en áreas específicas de la vida diaria:

• Una mayor capacidad creativa y disminución de síntomas depresivos (onda alfa).
• Sanación emocional y empoderamiento personal (onda theta).
• Una mejor calidad de sueño (ondas delta).
• Un mejor rendimiento académico y laboral (ondas gamma y beta).

Por consiguiente existen cinco tipos de ondas reconocidas por la ciencia:

• Onda Gamma. Su frecuencia oscila entre los 35-80 Hz. Se asocia con estados cerebrales de concentración y resolución de problemas.
• Onda Beta. Su frecuencia oscila entre los 12-35 Hz. Se relaciona con el estado cerebral dominado por la ansiedad y el estrés.
• Onda Alfa. Su frecuencia oscila entre los 8-12 Hz. Se relaciona con estados de atención pasiva, relajación y reflexión.
• Onda Theta. Su frecuencia oscila entre los 4-8 Hz. Se asocia con estados de profunda relajación y somnolencia.
• Onda Delta. Su frecuencia oscila entre los 0.5-4 Hz. Se relaciona directamente con el sueño.

Estimulación cerebral desde casa: música para ondas alfa

Aunque ningún tipo de onda es más importante que el resto, las ondas alfa se consideran el puente que une el mundo interior con el exterior.

• Las ondas alfa se ven en el electroencefalograma (EEG) durante estados de vigilia interesantes en los que no se está dormido, pero tampoco del todo despierto. Podría decirse que el cerebro está “abierto”, esto explica por qué la estimulación de ondas alfa puede ser tan positiva durante procesos creativos.
• Lo mismo ocurre en sentido contrario: un patrón de ondas alfa desequilibrado puede hacer que nos sintamos desenfocados, somnolientos o con las ideas “en el aire”.
• Las ondas alfa pueden ser estimuladas musicalmente con sonidos bineurales, que es el método más eficaz de estimulación cerebral con música.

Los sonidos bineurales son “latidos” que operan en frecuencias específicas para estimular determinadas ondas cerebrales; de hecho, la terapia bineural es una solución emergente que ha dado resultado para muchas personas como tratamiento para la ansiedad, la depresión, el estrés y los problemas de concentración.

Si deseas saber más información acerca de estos temas, te invitamos a leer los artículos de nuestro blog: Mundo Holístico
Fuente: https://blog.clubviva.cl/