Terapia homeopática para el vértigo. Hablamos de mareo cuando el paciente se queja de una sensación de falta de equilibrio en el espacio. Sabiendo que, en la práctica, a menudo nos enfrentamos a un falso vértigo. Por tanto, es necesario realizar un diagnóstico nosológico para conocer el origen de estos vértigos.

Ya sean de origen central (causa neurológica), de Menière de origen vestibular (vértigo rotatorio con náuseas, vómitos, pitidos en los oídos o sordera), menièriformes, postraumáticos (síndrome subjetivo de traumatismo craneoencefálico), por ejemplo Neuro-vegetativo distonía, por artritis cervical o incluso por aterosclerosis e hipertensión arterial, describiremos en este artículo medicamentos homeopáticos de acción sintomática así como medicamentos de campo.

Medicinas sintomáticas

Se toman a diario en caso de vértigo recurrente y a diario en caso de vértigo aislado o crisis paroxística .

Bryonia:

Este medicamento corresponde de hecho a un mareo agravado por el menor movimiento del cuerpo o de la cabeza, especialmente por la mañana cuando está sentado en la cama.

Chenopodium anthelminthicum:

Estará indicado ante vértigo repentino de Menière, con sordera secundaria, en un sujeto frecuentemente migrañoso que presenta dolor en la región hepática.

China:

Indicado en mareos con zumbidos en los oídos en sujetos hiperestésicos cansados, que a menudo ocurren en un contexto de anemia.

Chininum sulfuricum:

Esta cepa es adecuada cuando nos encontramos con: mareos, acúfenos y sordera.

Cocculus:

El mareo se acompaña de náuseas, vómitos y malestar lipotímico que no mejora con el aire fresco; se desencadenan o empeoran por la fatiga o por los viajes en automóvil.

Conium maculatum:

El sujeto se queja de una impresión de rotación de objetos, de una sensación de vértigo al estar acostado y de un aumento en cualquier rotación de la cabeza.

Salicylicum acidum:

El vértigo giratorio se acompaña de pérdida auditiva y zumbidos. Otros derivados salicilados tienen una patogenia muy similar: Natrum salicylicum, Chinicum salicylicum.

Tabacum:

El medicamento es adecuado para mareos acompañados de náuseas con palidez, sudores fríos y estado sincopal . Los síntomas mejoran al cerrar los ojos y al aire libre.

Medicinas distónicas

En el tratamiento de este terreno, se recordará la importancia de Ignatia, Moschus y Nux vomica. Otros fármacos son más específicos para el vértigo:

Argentum nitricum:

El “vértigo” se da en un contexto de agitación, precipitación, neurosis fóbica (en particular vértigo de alturas). Puede ir acompañado de temblores y dolores de cabeza.

Gelsemio:

El vértigo se acompaña de visión borrosa, temblores, ansiedad con enturbiamiento, signos vasomotores y simpáticos.

Lachesis:

El vértigo puede desencadenarse por claustrofobia. El diagnóstico se realiza principalmente sobre los signos generales del paciente: hiperestesia, mejoría por una descarga.

Phosphoricum acidum:

El vértigo se acompaña de malestar en un contexto de astenia, dolores de cabeza por esfuerzo intelectual o sigue a un shock emocional grave.

Medicamentos homeopáticos para la artritis y los mareos postraumáticos.

Árnica:

Esta droga es adecuada en todas las consecuencias del trauma. También encuentra su indicación en microtraumatismos por deformidades artríticas.

Natrum sulfuricum:

Es el medicamento homeopático para el síndrome subjetivo de traumatismo craneoencefálico. También está indicado en el contexto de dolores articulares muy agravados por la humedad en sujetos que presentan el modo de reacción sicótica.

Actaea racemosa:

Los pacientes se quejan de “mareos”, una sensación de cabeza envuelta en algodón, dolor de cuello o dolor de espalda superior. En las mujeres, estos síntomas empeoran durante el período.

Fuente: https://blog.soin-et-nature.com/

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