Los diapasones como instrumentos terapéuticos.
Diapasones para sanar
En este siglo, los diapasones como instrumentos terapéuticos en el mundo occidental han redescubierto y se han probado científicamente lo que las antiguas culturas ya conocían, y que en oriente se conoce desde hace siglos: El universo está hecho de sonido.
“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.” (Juan 1,1).
El poder del sonido
Cada átomo, partícula, y molécula está en constante vibración y por tanto tiene un pulso. El pulso crea ondas que nuestros sentidos perciben como formas (físicas o etéreas). Todo lo que tiene pulso, onda y forma, es decir, todo lo que hay en el Universo, tiene un sonido.
El principio básico de la sanación con sonido es el concepto de resonancia simpática (la resonancia que está en la frecuencia vibratoria de un objeto). Todo el universo está en un estado de vibración. Esto incluye a los seres humanos. Cada órgano, célula, hueso, tejido, líquido del cuerpo; también todos los campos electromagnéticos (aura) que rodean a la persona, tienen una frecuencia vibratoria sana. Si no estamos resonando con alguna parte de nosotros mismos o de lo que nos rodea, nos volvemos disonantes y por lo tanto insanos.
Nuestra frecuencia naturalmente sana se convierte en una frecuencia que vibra sin armonía y crea enfermedad.
A través del uso de la voz, de las herramientas sonoras como los diapasones y de los instrumentos musicales terapéuticos, podemos proyectar la frecuencia resonante correcta hacia y sobre cualquier parte insana de nosotros mismos, reintegrándole así su frecuencia normal consiguiendo como resultado una sanación. Esto ocurre a través de la resonancia simpática cuando un objeto vibrante influye en otro objeto vibrante, o incluso en uno estático, causando cambios en su índice vibratorio.
Por lo tanto, si nosotros deseamos efectuar un cambio dentro de nosotros o de nuestro entorno, tanto en el plano físico como en el etérico, debemos identificar primero el o los correspondientes sonidos y dirigir el sonido a las partes en cuestión.
¿Cómo funcionan los diapasones?
El sonido tiene la capacidad de alterar la forma material con el fin de provocar cambios en los niveles físico, etérico, emocional y espiritual. Es muy importante en todo momento recordar que el poder de la intención es vital en cualquier proceso curativo.
A través de la aplicación del sonido y la intención podemos influir positivamente en la evolución humana hacia el logro de una consciencia más elevada y una forma física más sana.
Conclusión
Cuando estamos enfermos, nuestra vibración se distorsiona y pierde armonía con este ciclo. El diapasón OM trabaja para devolver esta vibración armoniosa a todo nuestro sistema: físico, mental, emocional y espiritual. Se puede utilizar primero cerca de los oídos, ya que el sonido viaja por el cuerpo y el cerebro desde el nervio auditivo. Se puede utilizar en los cuerpos energéticos sutiles, y finalmente en los huesos y meridianos del cuerpo físico. Como con todos los diapasones, es más eficaz si uno imita el sonido del diapasón con la voz. Esto aumenta la potencia del tratamiento notablemente.
Si deseas saber más información estos temas, te invitamos a leer los artículos de nuestro blog: Mundo Holístico
Fuente: https://soundhealingshop.com/